Barahona.- El Colegio Médico Dominicano (CMD), llevó a cabo una vigilia a la entrada de la emergencia del Hospital Regional Universitario Jaime Mota, con varios médicos y enfermeras.
La protesta es en demanda de la terminación de la reconstrucción, así como el reinicio de los trabajos del principal centro de salud de la región que lleva más de un año que iniciaron las autoridades.
La vigilia-protesta inició pasadas las ocho de la noche del jueves, encabezada por el presidente de la interprovincial Barahona-Pedernales del CMD, Alexander Herasme Peña, portando velas encendidas para iluminar al gobierno para la pronta terminación del centro de salud.
Herasme Peña, dijo que los inconvenientes que provoca la supuesta falta de espacio haciendo que la atención al paciente se conviertan en un caos y en una pesadilla para el médico, tras cuestionar el hacinamiento al que son sometidos.
Afirmó que pacientes, sin importar su situación, ya sean éstos clínicos, quirúrgicos u otras dolencias se internan en una misma sala, atentando contra la salud de las personas ingresadas.
Reiteró que sin importar la condición de salud del paciente todos son ingresados en una misma área, en el caso de las mujeres y los hombres están en las habitaciones destinadas para los médicos que laboran en el centro.
“Se debe a la falta de espacio para el trabajo que debemos desarrollar médicos y enfermeras, pero a esto se añade, la falta de insumos, de medicamentos, equipamiento, los quirófanos y, por supuesto, la terminación del hospital, que lo terminen porque hace falta todo”, indicó.
Afirmó que esta situación de hacinamiento va en detrimento del paciente, ya que están expuestos a enfermedades nosocomiales “y si una persona viene con una diabetes descompensada puede irse a la casa con una bronconeumonía, pudiendo esto provocar el deceso del o la paciente.”.
Recordó el presidente de la Interprovincial Barahona-Pedernales del CMD, que no es más de un año que tiene en reconstrucción el Hospital Regional Universitario Jaime Mota, sino once y no hay manera que el centro sea terminado por las autoridades.
Hace cuatro meses que la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE), paralizó sin explicación los trabajos, mientras los servicios médicos a la población se prestan en medio de precariedades y desorden.
Señaló que cuando sea terminado el hospital habrá que comenzar a reconstruir las áreas de internamiento para hombres y mujeres, ya que por la situación a la que es sometida se está deteriorando “más rápido que a la carrera”.
Se recuerda que el pasado año 2018 murieron decenas de niños y niñas recién nacidos en el Hospital Regional Universitario Jaime Mota, atribuido a la gran cantidad del polvillo generado por el proceso de reconstrucción del centro médico de salud del Estado.
