Fueron sepultados en el cementerio de Las Tablas en la provincia Peravia, los restos de Elvin Esteban Díaz Espinal, el hombre que violó y asesinó a una niña de 8 años y luego se suicidó.
En el sepelio donde acudieron pocas personas, ninguno de los familiares quiso dar declaraciones a la prensa. Fue un entierro rápido sin gestos de dolor ni consternación.
Mientras, en Gualey, Pizarrete, el panorama era distinto, se encontraban los familiares de la víctima, quienes tuvieron que enterrar antes de lo previsto el cuerpo de la menor por la descomposición que presentaba.
No se explican cómo sucedieron las cosas, ya que la niña sólo pasaría una noche acompañando a su prima, debido a que su concubino dijo que no amanecería en la casa.
Narraron que la menor de 8 años era una niña tranquila y alegre. Manifestaron conformidad ya que según dicen, el asesino pagó con su muerte.
En tanto, la tarde de este miércoles fue trasladada en estado delicado al hospital Juan Pablo Pina de San Cristóbal, Harolyn Isabel de 20 años, pareja del asesino y prima de la víctima. Según testigos, tiene varios meses de embarazo. Dicen que luego de agredirla a golpes la llevó al hospital y la abandonó. Saliendo de ahí se suicidó ingiriendo una sustancia tóxica. Su cuerpo fue hallado dentro del tinaco de su casa materna.
