Las actividades turísticas y comerciales en el área costera del municipio de Boca Chica se han reducido un 85% por ciento en los últimos dos meses, tras el problema de la acumulación del sargazo que afecta la playa y el litoral costero donde operan más 500 apartahoteles, según la alcaldía de Boca Chica.

Con el propósito de enfrentar la situación, el cabildo de Boca Chica inició un amplio programa de recogida de ese material de las aguas del litoral sur y de la playa, empleando brigadas de obreros y más de treinta camiones.

La propagación del sargazo impide que los turistas que se hospedan en los apartahoteles de Boca Chica puedan bañarse y recrearse en las aguas cercanas a los negocios, debido al mal olor que desprende el material en descomposición, contaminando el medioambiente y toda el área del litoral.

En las tareas de limpieza de las áreas y recogida del vegetal de las aguas de la playa de Boca Chica, se han sumado comunitarios, propietarios y administradores de los negocios, así como sus empleados, preocupados por la situación.

El problema del aumento del sargazo ha provocado una merma considerable en la afluencia de visitantes extranjeros y dominicanos, tanto a los hoteles turísticos como al área de la playa, por el mal olor y la contaminación que surge de las aguas del balneario.

Con relación al caso el alcalde de Boca Chica, Fermín Brito, manifestó que durante el pasado mes de mayo se retiraron unos 120 camiones del vegetal que copa toda la franja costera que compone la playa de Boca Chica, Andrés, la Playita, entre otras áreas de recreación del área marina del poblado.

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Brito pidió la urgencia colaboración del presidente Luis Abinader y del Ministerio de Turismo para que contribuyan con la limpieza del balneario y del litoral costero donde se nota la acumulación y presencia del vegetal.

Explicó que existe un estimado de más de 200 comerciantes ubicados en el área de la playa que han sido afectado, cuyos negocios prácticamente están inactivos por el problema del sargazo.

“Ahora mismo la visita de los bañistas a la playa se ha reducido considerablemente, porque la gente no quiere bañarse por la contaminación de las aguas y el olor desagradable que brotan de las mismas”, dijo el alcalde.

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