Como preámbulo a la paralización que amenazan realizar a partir del lunes próximo, se lanzaron a sus deteriorados caminos y calles los moradores de sectores del Distrito Municipal Hato del Yaque en Santiago, demandando agua potable, calles y un servicio más eficiente de salud.
Cómo detener un Chikungunya que abarrota hospitales, es difícil saberlo en Hato del Yaque, donde en sus calles las aguas residuales entumece el olfato y el servicio de agua es tan precario que apenas llega cada mes.
Pero el agua, que además no es potabilizada con el rigor debido, es uno de los tantos males de barrios como La Rinconada, Los Jimenes, La Mina, San Antonio y otros de los más de 30 que componen el Distrito, pues mientras esperan se instalen las tuberías de 6 pulgadas que INAPA ya presupuestó, las calles, entre pedregales, no se pueden reparar.
A partir del lunes, clubes de madres, juntas de vecinos, dirigentes choferiles y demás organizaciones sociales, paralizarán las labores en todo el distrito. El servicio de Salud que ofrecen con esmero los dos únicos médicos asignados para más de 65 mil habitantes, en el Hospital de Aquí, es otro quebranto para la gente de poquísimo poder adquisitivo.
Esto, los obliga a requerir del servicio privado que se les ofrece a pocos metros del centro de salud.
La falta de una planta para el tratamiento de las aguas residuales tiene ataviados en el hedor a los contribuyentes de este Distrito.
En Santiago amenazan con protestar, demandan mejoría en servicios básicos
