Diputados del Partido Revolucionario Moderno y Guido Gómez Mazara del Revolucionario Dominicano, manifestaron que las acusaciones entre los dirigentes del partido de la Liberación Dominicana, Franklin Almeida Rancier y el vocero del gobierno Roberto Rodríguez Marchena por el cobro de 250 mil pesos sin justificar revelan los niveles de corrupción Administrativa del actual gobierno.
Los legisladores de la oposición Josefa Castillo y Amado Díaz, deploraron que el presidente Danilo Medina siga abultando la nomina del Estado con el nombramiento de altos dirigentes de su organización sin ninguna función.
En tanto, Guido Gómez Mazara calificó de vergonzoso que un miembro del comité político del PLD reciba un salario de 250 mil pesos sin trabajar. Lamentó que mientras los dirigentes peledeísta se reparten el estado como un pastel los trabajadores ganan menos del salario mínimo.
En ese sentido monseñor Lorenzo Vargas dijo que el enfrentamiento le hace un flaco servicio a la clase política. El sacerdote llamo a los oficialista a bajar el tono.
En otro orden los dirigentes políticos aseguraron que si el gobierno de Danilo Medina, elimina las botellas que cobran sin trabajar no será necesario hacer una reforma fiscal.
