Murió este martes de un paro respiratorio el niño Miguel Antonio Santos, de seis meses de nacido para quien sus padres solicitaban ayuda para poder pagarle un trasplante de hígado.
En una humilde vivienda del sector 27 de Febrero del Distrito Nacional, son velados los restos del niño Miguel Antonio Sánchez, quien fue diagnosticado con atresia de las vías biliares a sus cuatro meses de vida.
La impotencia y el dolor invaden a los padres del pequeño quienes se lamentan de no haber reuniendo los 120 mil dólares requeridos para el trasplante de hígado que necesitaba el tercero de sus vástagos.
En medio de llanto y consternación aseguran que tocaron todas las puertas para salvar la vida del bebé pero no fue posible a pesar de tener el donante.
El Estado dominicano solo les facilitó 10 mil dólares como parte de la ayuda requerida.
Los restos del menor serán sepultados este miércoles en el cementerio Cristo Salvador.
Muere bebé que necesitaba trasplante de hígado
