Santo Domingo.- La misa dominical de la Parroquia Santa Cecilia en Los Rosales de Santo Domingo Este, estuvo muy concurrida hoy, a menos de una semana de que se supiera del asesinato del adolescente Fernelis Carrión, a manos del suspendido sacerdote, Elvin Tavares.
Impactados por la tragedia dicen sentirse algunos feligreses de la iglesia que durante casi dos años estuvo a cargo de Tavares. Sin embargo explican que no dejan de congregarse porque su fe está puesta en Dios y no en hombres.
Hay quienes piensan que el asesinato cometido por el religioso podría influir afectar a la comunidad católica.
El tema no fue tocado en la eucaristía, oficiada por el padre Frankelly Rodríguez, de la iglesia Paz y Bien, quien estará al frente de manera provisional.
A su salida de la misa el sacerdote rehusó referirse al tema, al igual que muchos feligreses.
La casa curial, ubicada al frente de la iglesia permanecía cerrada.
