Comunitarios del sector La Javilla, cerca de la carretera vieja de Sabana Perdida, se lanzaron a las calles a protestar por la muerte del motoconchista Leónidas Galván González, de 26 años de edad, alegadamente a manos de agentes policiales. Indignados tomaron las calles de la barriada, quemando gomas, y lanzando escombros a las vías.
Los residentes clamaban justicia por el asesinato a tiros del joven. La multitud no se atemorizó por la presencia de agentes policiales que trataban de poner el orden.
Según ellos, el segundo teniente de la Policía, conocido como Adón (alias Rambo), juntos a otros agentes, integran una banda de atracadores que tienen en zozobra a las personas del lugar.
Denunciaron que mataron al motoconchista porque se resistió a que le roben.
Familias de la victima pidieron al jefe de la Policía que abra una investigación sobre el hecho, ya que este joven deja en la orfandad una niña de dos años, y su esposa con seis meses.
