En una residencia de La Salvia-Los Quemados, del municipio Bonao en Monseñor Nouel, fueron halladas las osamentas de una mujer, a la que su esposo había sepultado en una especie de bóveda en una habitación, porque supuestamente en el cementerio de la zona, para entonces, no había condiciones.
La fiscal adjunto, Francisca Fabián, aclaró que la mujer, había muerto por razones de enfermedad en la década de los años 80 y que el hombre, de apellido Lachapelle, no lo informó a la hija menor quien hace unos días alquiló la vivienda, cuya inquilina está traumatizada por el hallazgo los huesos desde que halló los restos en la casa.
