El monumento a la caña volvió a ser desmantelado por rateros y desaprensivos que robaron parte de sus piezas.
Construido a cerca de la margen oriental del Río Ozama, el monumento Acla Caña ya no cuenta con el nombre que lo identificaba, y no es la primera vez que esto sucede.
Es que luego de su remozamiento en la gestión de Juan de los Santos se ubicó una dotación de la Policía Municipal que mantenía a raya a los ladrones, pero desde el cambio de autoridades fueron sacados del lugar.
Entre las piezas robadas está el niño que caminaba junto a la mujer que carga la canasta, todo elaborado Por olfrebres en bronce traído de Italia.
Lo que era el destacamento es ahora cueva de ladrones y prostitutas.
Dicen quienes allí viven que antes el Ayuntamiento de Santo Domingo Este lavaba el monumento y lo cuidaba.
La falta de vigilancia también ha provocado que las luces que iluminaban el monumento y el entorno fueran desmanteladas, robando cables y reflectores.
Y dice una leyenda encriptada en las piedras que 1420 Enrique, un infante Portugués intrudujo la caña al país, y que el monumento se erigió en el lugar, porque ahí se ubicó el primer trapiche de América.
Desmantelan y le roban al monumento a la caña
