Los trabajadores cañeros retomaron su lucha para reclamar las pensiones que aún faltan por otorgar. Lo hicieron con una multitudinaria marcha desde su local de la Máximo Gómez hasta el Instituto del Seguro Social.
Pese al desgaste de los años, los cañeros marcharon con sorprendente energía. Y es que le sobran motivos para redoblar fuerzas. Pese a su larga lucha todavía el 75 por ciento de ellos continúa a la espera de un tercer decreto del poder ejecutivo que autorice sus pensiones.
Con los dos anteriores decretos solo 3 mil 118 cañeros recibieron su pensiones quedando pendientes más de 5 mil.
A su rosario de quejas se suma el hecho de que ninguno de ellos posee seguro médico.
La marcha partió del local de la Unión de Trabajadores Cañeros de la avenida Máximo Gómez hasta el instituto del Seguro Social.
Fue una manifestación pacífica, custodiada y ordenada por agentes policiales y de la Amet.