Más de doscientas personas permanecen refugiadas en el Distrito Nacional residentes en los sectores La Zurza y Los Guandules, ubicados en la ribera del rio Ozama.
Entre los albergues está el cuerpo de bomberos de Los Guandules con 57 personas y la funeraria municipal de La Zurza, con 147 refugiados de los cuales la mayoría son niños.
Un equipo de Salud Pública está fijo en ambos lugares colocando vacunas y con medicinas para tratar enfermedades ambulatorias.
Los barrios de la capital ubicados en la margen del río Ozama ya no están anegados pero corren el riesgo de inundarse si continúan las lluvias.
Algunas familias no han abandonado sus hogares, aunque tienen los enseres recogidos. El temor a que les roben lo poco que tienen los obliga a quedarse hasta esperar el último momento.
Sus residentes, quienes además del peligro que representa que entre el rio, están sobre aguas contaminadas de cañadas, piden al presidente Danilo Medina que los saquen del lugar.
En octubre del año pasado, el gobierno anunció el proyecto Domingo Sabio en el que ubicaría las personas que están en peligro, igual como lo hizo con la barquita, pero aún no ha iniciado.
