La situación era sombría la mañana del 25 de noviembre en las instalaciones de la asociación Kouraj. La tristeza recae sobre los pocos miembros de la comunidad M que se encuentran allí.
Estos últimos dejan en claro que no dirán una palabra a la prensa. Una especie de omerta bastante comprensible pero que deja muchas incertidumbres sobre las condiciones de la muerte de su líder. Uno de sus ayudantes, bajo el pretexto del anonimato preciso de que Charlot no era un hombre excesivo, llevó más bien una existencia casi monástica.
«A diferencia de la mayoría de nosotros, no le gustaban las fiestas, siempre estaba en casa. Lo pensó dos veces antes de participar en ciertas actividades. Es por eso que su muerte me sorprende», dijo el empleado de la institución asociada Kouraj.
Estaba consciente de su homosexualidad desde la infancia, pero es solo en la mayoría que su familia lo acepta dando la bienvenida a su pareja de la época a pesar del hecho de que vivió en un distrito popular. Juzgado demasiado afeminado, se vio obligado a no presentar su candidatura para el puesto de delegado de su clase.
También tenía prohibido presentar su proyecto de tesis al final de sus estudios en la Facultad de Derecho por parte de su maestro, quien evoca su fe religiosa para justificar su negativa. «Llegué a comprender que no tenemos más remedio que comprometernos ahora para que llegue a su fin», dijo, según el sitio web de su asociación.
Kouraj originalmente se llamaba Ami-ami, una estructura que quería defender la posición de los homosexuales en la sociedad. La asociación adopta el nombre actual durante el año 2010, el hallazgo de discursos homofóbicos transmitidos por círculos religiosos que querían asociar el terremoto a los pecados. A partir de 2011, la asociación se hace visible y sus acciones contra la homofobia toman un giro político.
Charlot Jeudy, como líder carismático, ha liderado varios proyectos para que su comunidad identifique el término genérico LGBTI. Kouraj ofreció apoyo a los jóvenes homosexuales abandonados por sus familias en una entrevista que le dio a David Pieto para el sitio Minujusth. El activista por la causa LGBT fue particularmente exitoso en 2017 con respecto a la protesta por las dos leyes del Senado propuestas dirigidas a la comunidad LGBTI.
La desaparición del activista no deja a todos indiferentes. Algunas instituciones, incluida la Embajada de Francia en Haití, hacen pública su opinión sobre su partida prematura. Esta representación diplomática en un comunicado deplora «la pérdida de este valiente defensor de los derechos humanos y, en particular, de las personas LGBTI». Invita a las autoridades haitianas a tomar medidas para arrojar luz sobre la desaparición de Charlot Jeudy.
Por la noche, la Embajada de los Estados Unidos en Puerto Príncipe también lamentó la muerte prematura de Charlot Jeudy, presidente de la organización Kouraj. «Lamentamos sinceramente la partida de este incansable defensor de los derechos humanos y la equidad en Haití y creemos que su memoria continuará a través de los valores y principios a los que ha dedicado su vida», escribió la embajada en un comunicado, publicado en su cuenta de Twitter.
