Un nuevo ataque israelí cerca de una escuela de Naciones Unidas en el sur de la Franja de Gaza dejó al menos 10 palestinos muertos y 20 heridos este domingo.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon calificó lo ocurrido de «ultraje moral y acto criminal» y aseguró que constituye una «total violación del derecho internacional». La portavoz del departamento de estado de EE.UU., Jen Psaki, dijo que su país estaba consternado por el «vergonzoso» bombardeo.
En la noche de este domingo Israel anunció un cese el fuego en la mayor parte de la franja que durará siete horas -comenzando a las 7:00 GMT (10 de la mañana hora local)- para facilitar la entrada de ayuda humanitaria.
Un general de brigada israelí, Yoav Mordechai, aclaró que la tregua no tendrá efecto en la ciudad de Rafah, en el sur de Gaza, y que Israel retomará las acciones si es atacado.
La explosión ocurrió en la entrada del colegio, que alberga a miles de desplazados por el conflicto. Israel, por su parte, negó que la escuela fuera su objetivo.
Testigos aseguran que el misil impactó sobre personas que hacían fila para obtener comida.
Sin embargo, las fuerzas israelíes aseguran haber abatido a tres militantes de Hamas que iban en bicicleta. Hasta ahora, el grupo islámico radical no ha reportado la muerte o heridas de ninguno de sus miembros.
El portavoz del gobierno de Israel, Mark Regev, dijo que los militantes que se resguardan cerca de escuelas y las convierten en zonas de guerra deben ser señalados como responsable.
Tomado de BBCMUNDO