Hampshire, Inglaterra.– Fiona Hooker, la mujer que es alérgica a su propio hijo, quedó embarazada de su segundo a finales del 2020. Esta explica que los primeros dos trimestres del embarazo transcurrieron sin problemas, pero después comenzó a notar manchas rojas en el estómago dos meses antes de dar a luz.
Hooker dijo “Fui al médico después de unos días porque cada vez me picaban más y eran insoportables”, en una entrevista en South West News Service.
A través de este proceso a Hooker le empezaron a salir dolorosas ampollas en todo el cuerpo y el diagnóstico de los médicos fue más cruel aún.
En este sentido la mujer contó que durante el embarazo las manchas se sentían como picaduras de ortiga, que es una hierba verde.
Resaltar que no fue sino a los ocho meses de embarazo, cuando las ronchas se habían vuelto tan graves que Hooker tuvo que ir de urgencias al hospital.
Los médicos le recetaron una variedad de cremas con esteroides, pero estas recomendaciones hicieron poco para disminuir la gravedad de los síntomas.
“No podía soportar el dolor. Me dieron cuatro días de esteroides orales que realmente ayudaron a calmarlo mas no a eliminarlo”, afirmó Fiona.
