El Departamento de Estado de Estados Unidos impuso restricciones de entrada al país a varios funcionarios del gobierno de Venezuela por considerarlos responsables o cómplices en violaciones de los derechos humanos.
En un comunicado, EE.UU. resaltó la respuesta de las fuerzas de seguridad del gobierno venezolano a las manifestaciones y protestas relacionadas a las condiciones económicas, sociales y políticas que atraviesa el país sudamericano.
El departamento no identificó a los individuos a quien se les ha vetado la entrada a EE.UU.
La medida se produce tres días después de que el general venezolano Hugo Carvajal, acusado por la justicia estadounidese de narcotráfico, fue liberado en Aruba, donde había sido arrestado tras la solicitud de EE.UU. el viernes.
«En Venezuela es sabido que muchos funcionarios del gobierno viajan con frecuencia a EE.UU., como por ejemplo el exjuez Benny Palmeri-Bacchi arrestado el viernes en su camino a Disney, en Orlando», añade el corresponsal de BBC Mundo en Venezuela, Daniel Pardo.
«Sin embargo, algunos analistas han dicho que el gobierno venezolano se puede ver beneficiado por este tipo de sanciones, pues podrán responsabilizar a EE.UU. de tener un plan para desestabilizar a Venezuela», señala nuestro corresponsal.
El Departamento de Estado añade que ha habido constantes esfuerzos de la parte oficial para reprimir la «legitima expresión» de inconformidad a través de «detenciones arbitrarias y uso excesivo de la fuerza», como también límites a la libertad de prensa para intimidar y silenciar a la oposición.
«Nuestro mensaje es claro: aquellos que comenten este tipo de abusos no serán bienvenidos en Estados Unidos», expresó la portavoz Marie Harf en el comunicado.
Tambén aclaró que la medida solo está dirigida a aquellos responsables de violaciones a los derechos humanos y no al pueblo ni la nación venezolana.
