El presidente de Estados Unidos agradeció la acogida y la disposición del gobierno encabezado por Raúl Castro, para avanzar en las regularización de las relaciones entre ambas naciones, al concluir la reunión con el presidente cubano Raúl Castro.
Señaló que acoge con beneplácito este diálogo, “porque creemos que cuando asumimos nuestras ideas con un profundo respeto podemos mejorar las relaciones”.
Expresó que hay mucho trabajo por hacer, porque se trata de ponerse al día con medio siglo de trabajo y las relaciones entre Cuba y Estados Unidos no se transformarán de la noche a la mañana.
Estados Unidos no pretende decir a Cuba cómo debe gobernar, sino que debe asegurarse de que las conversaciones se desarrollan de manera franca y honesta.
Reveló que ambos países seguirán el diálogo sobre derechos humanos, en una reunión que se celebrará este año en La Habana.
Expresó que conversaron de manera franca sobre derechos humanos y otros temas. “El destino cubano no va a ser decidido ni por Estados Unidos, ni por ninguna otra nación. Será decidido por los cubanos y nadie más” expresó Obama.
Destacó que las grandes expectativas que ha concitado el viaje que encabeza en materia de negocios sobre todo. Resaltó que el gobierno norteamericano ha adoptado facilidades
para que los estadounidenses viajen a Cuba, entre los que figuran vuelos directos, crucero, entre otras iniciativas.
Expresó seguirá insistiendo al Congreso de Estados Unidos para que que levante el embargo comercial.
De igual manera señaló que acoge con beneplácito la eliminación de gravamen al dólar, entre otras medidas adoptadas por Cuba.
Obama asegura sólo cubanos decidirán el destino de Cuba.
El presidente de Estados Unidos agradeció la acogida y la disposición del gobierno encabezado por Raul Castro, para avanzar en las regularización de las relaciones entre ambas naciones, al concluir la reunión con el presidente cubano Raúl Castro.
Señaló que acoge con beneplácito este diálogo, “porque creemos que cuando asumimos nuestras ideas con un profundo respeto podemos mejorar las relaciones”.
Expresó que hay mucho trabajo por hacer, porque se trata de ponerse al día con medio siglo de trabajo y las relaciones entre Cuba y Estados Unidos no se transformarán de la noche a la mañana.
Estados Unidos no pretende decir a Cuba cómo debe gobernar, sino que debe asegurarse de que las conversaciones se desarrollan de manera franca y honesta.
Reveló que ambos países seguirán el diálogo sobre derechos humanos, en una reunión que se celebrará este año en La Habana.
Expresó que conversaron de manera franca sobre derechos humanos y otros temas. “El destino cubano no va a ser decidido ni por Estados Unidos, ni por ninguna otra nación. Será decidido por los cubanos y nadie más” expresó Obama.
Destacó que las grandes expectativas que ha concitado el viaje que encabeza en materia de negocios sobre todo. Resaltó que el gobierno norteamericano ha adoptado facilidades
para que los estadounidenses viajen a Cuba, entre los que figuran vuelos directos, crucero, entre otras iniciativas.
Expresó seguirá insistiendo al Congreso de Estados Unidos para que que levante el embargo comercial.
De igual manera señaló que acoge con beneplácito la eliminación de gravamen al dólar, entre otras medidas adoptadas por Cuba.
