Extremistas orquestaron un atentado suicida con un automóvil y luego se enfrascaron en un tiroteo con fuerzas de seguridad cerca del consulado estadounidense en la ciudad afgana de Herat el viernes en la madrugada, indicaron las autoridades, de acuerdo con The Associated Press.
Ocho personas murieron entre ellos los cinco agresores que según la agencia Efe formaban parte de un comando talibán; dos guardias de seguridad también perdieron la vida, así como un civil afgano que fue alcanzado por el cruce de disparos, informaron fuentes oficiales.
El ataque empezó con la explosión de un coche bomba frente al edificio donde se ubica el consulado estadounidense, tras lo que cinco insurgentes lograron superar el primer cordón de seguridad en torno al recinto, precisaron las fuentes, citadas por el canal de televisión local Tolo.
Luego de un tiroteo de unas dos horas con las fuerzas militares que defendían la sede diplomática, autoridades de EEUU informaron que todo su personal en la sede diplomática estaba a salvo.
El ataque comenzó este viernes a las 6 de la mañana
Qari Yousef Ahmadi, vocero del Talibán, adjudicó al grupo extremista la responsabilidad por el ataque, que puso de relieve la peligrosa situación de seguridad en Afganistán, donde las tropas encabezadas por Estados Unidos están reduciendo su presencia antes de un retiro total planeado para el año próximo, aseguró The Associated Press.
Los ataques insurgentes ya no están concentrados en el sur y el este del país, pero ocurren con preocupante frecuencia en el norte y el oeste, que en los últimos años han sido las áreas más pacíficas.
Un portavoz de la embajada estadounidense en Kabul declinó hacer comentarios.
El ataque del viernes siguió a un día y medio de excepcional alegría en Afganistán, donde personas de todos los ambientes estaban celebrando el primer campeonato internacional de fútbol.
El ataque comenzó alrededor de las 6 de la mañana con la poderosa detonación. El coche bomba activó sus explosivos a unos 60 metros (66 yardas) de distancia del complejo diplomático, dijo Sayed Fazlullah Wahidi, gobernador de la provincia de Herat. Otros extremistas entonces comenzaron a disparar contra las fuerzas de seguridad en el área.
Imágenes de la televisión afgana mostraban a la policía local retirando del lugar a personas ensangrentadas. Había escombros y piezas de metal retorcidas en un área extensa cerca del consulado.
Fuente: Univision.
