Al menos 73 personas han muerto, según el servicio de salud egipcio después de que seguidores de dos equipos de fútbol se enfrentasen al término de un partido en la ciudad egipcia de Port Said, en el noreste del país, según ha informado el periódico estatal 'Al Ahram'.
Poco después de las primeras noticias sobre el suceso, la televisión local mostró imágenes de un incendio en el estadio.
Los disturbios comenzaron cuando termino el partido con un resultado de 3-1 a favor de Masry ante el Ahly. Los hinchas del Masry invadieron el campo y fueron a agredir a los jugadores del equipo contrario lo que llevó a un enfrentamiento entre ambas aficiones.
"Las fuerzas de seguridad nos han abandonado, no nos han protegido", señaló uno de los jugadores del Masry, Mohamed Abou-Treika. "Un seguidor acaba de morir en el vestuario, delante de mí", añadió mientras que Mohamed Barakat, otro jugador, confirmó la muerde de varias personas. "Estamos viendo cadáveres. No hay fuerzas de seguridad o personal del Ejército para protegernos", aseguraba.
El vestuario, "una morgue"
El entrenador de los porteros, Ahmed Nagy, ha advertido de que "el vestuario se ha convertido en una morgue", informa Al Arabiya.
El viceministro de Sanidad egipcio, Hesham Sheiha, ha explicado a la televisión estatal que la mayoría de los heridos presentan contusiones y cortes. Sheiha, citado por la agencia Reuters, ha calificado de "desafortunado" el incidente.
Los incidentes se habrían extendido a un estadio de El Cairo donde se estaba jugando un partido entre los equipos Zamalek e Ismaili. La televisión egipcia ha mostrado imágenes de partes del estadio en llamas tras la decisión del árbitro de cancelar del encuentro al término de la primera mitad.
