HOUSTON:– Parecía una escena demasiado perfecta tener a Aaron Nola en la loma el lunes por la noche en el Minute Maid Park.
El derecho había experimentado casi todo con los Filis a lo largo de las últimas ocho temporadas.
Todo menos la postemporada. Pero eso cambió el lunes. Nola llevó un juego perfecto hasta la séptima entrada en una victoria por 3-0 sobre Houston para ayudar a Filadelfia a asegurar su primer boleto a playoffs desde el 2011. Los Filis arrancaron el partido con su número mágico en uno. Solamente necesitaban de un triunfo o de una derrota de los Cerveceros.
Milwaukee no cooperó.
Pero eso no importó.
No importó, porque Nola demostró lo mejor que tiene en el partido más importante de su carrera. Kyle Schwarber envió el primer pitcheo del derecho de los Astros, Lance McCullers Jr., sobre la barda entre el bosque izquierdo y central para poner arriba a los Filis por 1-0. Nola ponchó a nueve, mezclando de maravilla su sinker, curva y recta de cuatro costuras. Tenía un juego perfecto con dos outs en el séptimo capítulo, cuando concedió un sencillo hacia el bosque derecho contra el cubano Yordan Álvarez. David Hensley conectó otro imparable.
El piloto interino de Filadelfia, Rob Thomson, acudió al zurdo venezolano José Alvarado desde el bullpen. Nola salió del terreno sin ninguna clase de expresión en su rostro.
Parecía como cualquier otra apertura para el derecho.
Pero no lo era. Este era el encuentro más importante de los Filis en 11 años. Y Nola los ayudó a ganarlo.
¿Y qué tal ver cómo Zach Eflin terminaba el juego?
“Es una poesía”, exclamó Rhys Hoskins . “Una poesía”.
