INFOBAE:- En el partido de ida entre Toluca y Cruz Azul el marcador se inclinó a favor de los de Diablos Rojos, pues se llevaron una ventaja para el partido de vuelta en la Ciudad de México que se disputará en el Estadio Azteca.
A pesar de la demostración deportiva de ambos clubes, el encuentro se tornó polémico ya que hubo dos penales que terminaron en gol para los choriceros. Pero la segunda infracción causó enojo y reproche de los jugadores de Cruz Azul.
Al inicio de la segunda parte, cerca del minuto 48 el silbante Marco Antonio Ortiz Nava castigó a los cementeros con la pena máxima, en ese momento el marcador estaba empatado a un gol.
En una jugada dentro del área chica, Rubens Sambueza intentó acerarse al arco de Jesús Corona pero fue marcado por Roberto Alvarado. El defensor de la máquina celeste dejó la pierna estirada pues buscaba quitarle el balón a Sambueza.
Enseguida el futbolista argentino tropezó y cayó dentro del área chica, por lo que a criterio del juez se decretó la falta. Los jugadores se acercaron a reclamarle al árbitro sobre su decisión ya que afirmaron que no había ningún contacto y que se trató de una jugada limpia.
De inmediato empezó a surgir la polémica ya que algunos jugadores reprocharon que no intervino el video arbitraje (VAR) para revisar la jugada. Incluso, por medio de redes sociales, los seguidores de la máquina cementera reclamaron la decisión.
Michael Estrada fue el encargado de cobrarlo y no perdonó, mandó el esférico al fondo de la red e impuso el marcador de 2 – 1.
