Un agente de la Policía y tres supuestos sicarios cayeron abatidos durante un enfrentamiento a tiros que se prolongó durante horas, tras la localización de una »poderosa» banda que además se dedicaba al narcotráfico en numerosos pueblos del Cibao. La balacera ocurrió en una rural localidad de Maimón en la provincia Monseñor Nouel y desde allí.
Así quedó la vivienda donde hace pocos días se guarecían los miembros de la banda que según la Policía, era peligrosa y poderosa en tanto portaban armas de alto calibre como escopetas, fusiles y tres miras telescópicas, además de que operaba en todo el Cibao.
Los muertos fueron identificados como José Aurelio Ovalles alias Maicol de 35 años, otro tan solo identificado como José y un tercero, Miguel Angel de la Cruz Germán, caído horas después en Salcedo, provincia Hermanas Mirabal.
Los supuestos sicarios habitaban la casa con algunas mujeres y niños, estos últimos presuntamente usados como escudo humano por ellos.
La balacera fue ensordecedora, narran los vecinos de la localidad Jerusalén, donde hace poco vieron llegar a estas personas.
El agente caído en el enfrentamiento fue identificado como el raso Franklin Reyes de la unidad especial Swatt de Santiago. También de esa provincia eran los caídos en la balacera y al menos dos de los apresados, a quienes la uniformada identificó como Leobardo Figueroa y Diego Hernández.

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