A sus 32 días de vida, son remotas las posibilidades de llevar una vida normal en las niñas siamesas que nacieron el pasado martes en el Hospital Regional José María Cabral y Báez, desde donde se les trasladó al área neonatal del Hospital Infantil Arturo Grullón en Santiago.
La directora del pediátrico regional, Rosa Morel, dijo que las posibilidades de separación de las siamesas toracópagas, condición que define al producto cuando viene unido por el estómago y el tórax, son muy remotas o imposibles, debido a que comparten varios órganos vitales.
Las niñas, que nacieron tras un embarazo de 37 semanas de gestación, comparten un solo corazón dividido en dos, lo mismo que decir dos corazones, pero unidos e interconectados a través de una comunicación interventricular e interauricular diferentes, con ocho cavidades.
Las primeras evaluaciones se realizaron en el departamento cardiovascular del Infantil a cargo del doctor Juan Ramírez. También participan de su cuidado los especialistas Hilario María y el doctor Heredia, cirujano cardiovascular.
Las niñas comparten una sola vena aorta, que además está dilatada, es decir, más grande de lo normal.
Morel, también reseñó como una condición que hace más complejo el caso y las posibilidades de vida, que las bebés poseen un solo hígado grande, con una sola vena porta que es la que drena hacia la aurícula de uno de los corazones. Ese hígado tiene dos vesículas, pero siendo único, da una complejidad mayor.
Tienen, además, un solo cordón umbilical, con varias arterias y venas. Una hernia grande umbilical, denominada onfalocele, que por ahora los cirujanos no pueden separar.
Por las anomalías que presentan las siamesas, los cirujanos determinaron que es incompatible con una cirugía.´´Y en el caso hipotético de que se pudieran separar, no habría forma de que el corazón que le quede permita la vida, pues estaría muy comprometido, muy complicado para dar un pronóstico de vida a esas pacientes´´ comentó la directora del hospital.
En lo relativo a las azas intestinales, la doctora Morel explicó que solo una de las niñas hizo su primera evacuación (Meconio), lo cual indica que la segunda puede tener alguna anomalía colónica, intestinal.
Indicó que aun se deben practicar estudios que así lo determinen, pero que en los momentos no es posible pues, los practicados a nivel del colon comprometen la vida.
Desde anoche, las niñas, cuya madre fue dada de alta este jueves, empezaron a presentar síntomas de desaturacion, por lo que la captación de oxigeno a sus pulmones disminuyó en un 80 por ciento cuando lo normal es que sea de un 100 por ciento; lo que obligó a que se le de soporte ventilatorio a través de un método que se llama CPAP.
