Según el Ministerio de Educación, unos 5,6 millones de alumnos de 8,3 millones volvieron hoy a clase en 12 regiones del país y en la provincia autónoma de Trento.

En algunas regiones, como Campania, los Abruzos Apulia, han aplazado el inicio del curso hasta el 23 de septiembre, después de las elecciones regionales del 20 y el 21, y un día antes se abrirán en Cerdeña, mientras el colegio ya comenzó la semana pasada en la provincia autónoma de Bolzano.

“Los estudiantes tienen un gran deseo de volver a clase y recuperar la sociabilidad. Este será un año complejo, lo sabemos, pero hemos trabajado duro y construido una estrategia de prevención que funcionará si todos hacen su parte de manera responsable”, dijo esta mañana la ministra de Educación, Lucia Azzolina.

La apertura del curso es “un momento de intensa emoción. Una emoción que también viviré como jefe de un Gobierno que ha trabajado para una vuelta en seguridad, pero también como padre”, dijo Conte en su mensaje.

En el colegio público Col di Lana en el romano barrio de Prati, donde hoy empezaba el octavo grado su hijo Niccolò, se agolpaban esta mañana los periodistas que esperaban al primer ministro, que finalmente no fue visto.

“Creo que el presidente Conte es una figura que debe quedar un poco en un segundo plano para proteger a su hijo. Esto no es ni mejor ni peor: lamentablemente hay roles en los que no se puede ejercer la paternidad con la libertad con la que te gustaría”, explicaba la directora de este centro, Carla Costetti.

La directora apelaba a la responsabilidad de todos. “Si cada uno hace lo que debe y mantiene cierta atención, podemos ir adelante bien. En cambio, si no se guardan las distancias, no se ponen las mascarillas, hay aglomeraciones, veremos las consecuencias. Es esencial el distanciamiento”, señalaba.

Uno de los problemas para el inicio del curso es que los pupitres individuales prometidos por el Gobierno aún no han llegado a todas partes a pesar de que se comprometieron a entregar 2,5 millones, por lo que se aseguró que las entregas continuarán al menos durante todo octubre.

“No creo que sea un problema de que se hayan hecho las cosas tarde”, afirmaba en declaraciones a los periodistas.

Para el nuevo curso se han decretado protocolos para escalonar las entradas y salidas, distintos horarios para ir al baño o no dejar ningún tipo de material escolar en las aulas.

Si un alumno manifiesta síntomas compatibles con COVID-19, debe ser aislado y enviado a casa lo antes posible, y si da positivo a la prueba se iniciará el aislamiento durante 14 días para toda la clase y sus profesores.

El presidente de la República, Sergio Mattarella, acompañado de la ministra Azzolina, inaugurará oficialmente el curso escolar en Vo’, la localidad del Véneto que, junto con otros diez pueblos de la vecina Lombardía fueron el epicentro de la pandemia y donde se decretó la primera “zona roja” y el confinamiento de la población.

“Estar en Vo’ es una señal importante para un territorio que ha sufrido pero que nunca ha abandonado a sus alumnos. Será un hermoso día”, añadió Azzolina, deseando un feliz año escolar a los estudiantes.

 

Las escuelas de este municipio se cerraron el pasado 22 de febrero, solo un día después de descubrirse el primer caso y lo mismo sucedió con los otros nueve municipios que luego quedaron aislados en la zona roja.

El alcalde, Francesco Passerini, acompañado de varios concejales, recorrió algunos colegios para desear a los alumnos un “buen comienzo” porque “será un año delicado y complicado”.

Infobae, con información de EFE

Share.

Leave A Reply

Exit mobile version