El crimen de un mensajero vuelve a desnudar la realidad de violencia que vive la ciudad de San Cristóbal.
Familiares y amigos le daban el últimos adiós al mensajero Rafael Reynoso, de 50 años, quien en medio de llanto y tristeza fue dirigido a su última morada, después de ser asesinado de tres disparos por desconocidos en la avenida constitución en San Cristóbal.
Comunitarios de Los Asise en Sainaguá, informaron que la delincuencia le ha ganado la batalla a la policía.