En un ambiente de hostilidad y tensión fueron velados y más tarde sepultados en Moca, provincia Espaillat los restos de los hermanos López Méndez, asesinados este sábado por la Policía en un supuesto enfrentamiento a tiros, lo que impidió que medios de comunicación obtuvieran la posición de sus parientes respecto a la versión policial.
El velatorio de Omar y César Alejandro López Méndez, se desarrolló en el Club del callejón Los Maringüises en el Distrito Municipal Monte de la Jagua en Moca, de donde eran nativos.
La llegada de la prensa al local, debió ser al unísono, pues se advertía de la antipatía de allegados a la familia con los medios.
Advertían de que no permitirían el acceso. Acuartelados en la comandancia local, permanecían decenas de agentes de las fuerzas especiales de la Policía, quienes mantendrían el orden en el cementerio municipal, a donde fueron más tarde sepultados.
Sobre los jóvenes, que fueron estudiantes meritorios y de buena conducta, pocos comprenden el cambio radical que hubo en quienes decidieron tomar el crimen como cultura de vida.
De ahí que para la comunidad que los vio crecer, resulta difícil entender qué circunstancias les llevaron delinquir.
El director de la Junta Distrital de Monte de la Jagua y pariente de los hermanos, confirma el hostigamiento que vivieron sus padres, a quienes allanaban la vivienda constantemente. El padre de los jóvenes Alejandro López, fue detenido en innumerables ocasiones.