Podría extenderse por seis meses más la crisis en el suministro de agua potable que padecen Santiago y otras zonas del Cibao, provocado por los bajos niveles en el embalse Tavera-Bao, mientras, lamenta la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago que el panorama meteorológico no parece ser alagueño con la situación.
La lluvia del pasado fin de semana, apaciguó muy poco la sequía que desnudó los suelos donde yacía el agua de los embalses de la presa. A penas unas 4 pulgadas, lo que ha llevado a un nivel de 315 metros la medición, en tanto lo necesario es de 320 metros sobre el nivel del mar.
Al menos en Santiago, sectores como Los Reyes, Gurabo, Cien Fuegos, en la zona sur y suroeste, el suministro gotea, desesperando a los usuarios.
Las posibilidades de lluvia, en la cuenca del río yaque del norte son muy remotas a partir de octubre, lo que pone más sombrío el panorama.
Para palear la crisis, CORAASAN implementa tres medidas de mitigación, entre estas la regularización y sectorización del líquido, además de la distribución en camiones sisternas, 42 de ellos distribuyen diariamente 500 mil galones de agua en las zonas más críticas.