Tras vencer a la muerte, Yocairi Amarante, una joven a la que su expareja la dejó marcada para toda la vida, ahora se enfrenta a seguir adelante con una niña que aún no la reconoce por las cicatrices que no podrán ser borradas de su cuerpo ni de su alma.
Es difícil contener las lágrimas y el dolor porque no podré ser la misma de antes, así describe Yocairi el reencuentro con su hija de apenas tres años, luego de ser rociada con ácido del diablo.
A pesar de las secuelas en su cuerpo que le recordaran este horrible episodio toda su vida, Yocairi se mantiene positiva, de buen ánimo y con la mirada en el futuro, pues su hija es su mayor empuje.
Se recuerda que el caso de Yocaira salió a luz tras el vídeo que muestra el ataque.
La joven, que estuvo ingresada en la Unidad de Quemados del hospital Ney Arias Lora donde lucho hasta vencer a los pronósticos más oscuros, hoy agradece a todo el equipo médico que la atendió.
Mientras tanto su expareja cumple prisión preventiva en la cárcel del 15 de Azua.
Por: Eliana Cuevas.