Una casa se desplomó y otras 12 están al borde de derrumbarse, en el sector Santa Lucía de Cienfuegos, en el oeste de Santiago, donde los moradores atribuyen las pérdidas que dejaría a muchos sin hogar a las negligencias de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de la ciudad, CORAASAN.
Lo que se temía ocurrió. La vivienda que quedaba al filo del derrumbe, propiedad de Catalina Rodríguez, a quien entrevistamos en noviembre del pasado año, se desplomó dejándola en la intemperie.
La situación, la produjo, dicen los moradores, la ruptura del tubo mayor de agua potable, lo cual fue notificado a CORAASAN, pero el problema no fue afrontado a tiempo.
El terreno, carcomido por la avería, cedió, provocando la abertura estrepitosa de la tierra.
Los comunitarios, aseguran que sus esfuerzos por reunirse con Silvio Durán, director de Coraasan, han sido en vano.
El cráter formado, que hizo desaparecer un tramo de la calle 50, mantiene incomunicados a los barrios La Piña, La Mosca y Santa Lucía, acaparando, además, toda la basura de la inconciencia ciudadana.