Los trabajos de ampliación y remodelación de dos kilómetros de la autopista San Isidro, se ha convertido en un dolor de cabeza para los que circulan por allí, es notable el desorden que se produce en el tránsito y la presencia de agentes de AMET es casi nula.
Esta situación mantiene preocupados a los transeúntes que viven atemorizados al transitar por esta vía considerada como una de la más importante de Santo Domingo Este.