Aunque conocen la peligrosidad del huracán Irma los residentes en el café de Herrera dicen que no les queda otro camino que recoger algunas pertenencias, pero no saldrán de sus casas.
Ellos viven justo al lado de la cañada la Fe, y su mayor preocupación no es que van a comer durante y después de la tormenta, sino el agua que le sube hasta los segundos pisos cuando algún fenómeno natural los afecta.
Francisca Benítez vive cerca de la cañada, y tiene el mismo problema. Todavía no ha pensado que medidas preventivas tomará.
Este martes los dirigentes comunitarios de la zona mostraron preocupación, porque la cañada la Fe de El Café inunda todo cuando llueve, por eso llaman la atención del ayuntamiento de Santo Domingo Oeste y la CAASD.
Cuando se construyò la cañada tenía más de 13 metros de profundidad, hoy está casi al raìz de la calle. Dicen que en una parte fue rellenada cuando Rafael Corporán de los Santos era sindico, y ni la basura ni el agua tienen paso.
Al margen del peligro que corren, lo cierto es que la cañada está tapada porque los moradores inconscientes la han llenado de todo tipo de basura.