Santo Domingo.- En el servicio de transporte se ha relajado, desde hace varios meses, la rigurosidad de las medidas de bioseguridad implementadas al principio de la pandemia, y requiriendo solo, el uso de mascarrillas y la realización de filas para entrar a la terminal.
Aunque anteriormente se había prohibido el uso de los asientos contiguos, los usuarios ya no respetan la disposición cuyo cumplimiento tampoco es regulado por el cuerpo de seguridad en los vagones. Para las llamadas «horas pico» es notorio el gran número de personas que ingresan al Metro, obviando el distanciamiento social.
Lo que sí se continúa implementando es el privilegio otorgado al personal de salud y a los miembros de la Policía Nacional, al igual que a envejecientes y embarazadas, para entrar a las estaciones sin tener que integrarse a las enormes filas que provocan el descontento y quejas de la mayoría de los usuarios de manera frecuente.
Por: Crisaleidy Made.
