El Partido Revolucionario Dominicano (PRD) demandó hoy la adopción de políticas públicas “claras y definidas”, que tiendan a mejorar y desarrollar la industria forestal del país, reduzca la importación de madera y contribuya a mejorar la economía y las condiciones de vida del trabajador, a los fines de que se desarrolle, organice y fortalezcan las capacidades técnicas y de gestión del sector forestal.
“Es necesario que reduzca la presión en los bosques, a través de un desarrollo rural que promueva y fortalezca mecanismos de transferencia de recursos financieros a la comunidad, relacionados con el manejo sustentable de los bosques”, plantea el PRD en un documento suscrito por el ingeniero Danilo del Rosario, Secretario Nacional de Medio Ambiente, con motivo de celebrarse este sábado el Día Mundial Forestal.
Cuestiona el PRD que desde hace más de una década el ministerio de Medio Ambiente abandonó el programa nacional de reforestación de areas con vocación forestal, como Constanza, Jarabacoa y Restauración, donde operaban 11 viveros de producción de plantas con una capacidad para producir 40 millones de plantas al año, y que hoy no existen.
Cita que el crecimiento mínimo de estos últimos 10 años se ha producido por generación espontánea, pues no existe un programa nacional de reforestación ni manejo específico para las cuencas altas, medias y bajas, provocando erosión de las presas y diminución de los caudales fluviales.
El hecho de que no exista un programa nacional de reforestación ni las facilidades para que la iniciativa privada invierta a futuro, es la razón por la que el país tiene una gran dependencia de las importaciones de maderas, subrayan los ambientalistas del PRD.
Plantean que debido a sus condiciones climáticas, geomorfológicas y edáficas, República Dominicana cuenta con un gran potencial forestal, considerado el mayor entre los países de el Caribe, ya que el 67% de su territorio es de vocación forestal.
Dicen que pese a producirse esfuerzos en planificación y legislación forestal, es notorio el escaso avance del país en la materia.
A ese cuadro de imprevisión y falta de planificación estratégica, puntualiza el ingeniero Del Rosario, se agregan ataques a la masa boscosa, en acciones de deforestación que se producen con la indiferencia del ministerio de Medio Ambiente.
Y en algunos casos, agrega, el rumor público atribuye complicidad de representantes regionales en las devastaciones, como el reciente caso de Constanza, donde la población tuvo que empoderarse y defender sus recursos naturales.
A esos ataques, originados en talas indisciminadas para producir, Madera, carbón y leña y para el desarrollo de actividades agrícolas y ganaderas, se suman incendios forestales por causas naturales en ocasiones de largas sequías, o por acciones humanas que afectan sobre todo los bosques de pinos y áreas protegidas de la Cordillera Central.
Advierten que esos incendios pudieran ser evitados si se implementara un eficiente plan nacional de manejo del bosque, programa que existió de manera exitosa en el pasado, desconociéndose las razones de que hayan sido eliminados sus aspectos más exitosos.
