Peledeístas respetan que el Partido Reformista trille su propio camino, al tiempo de aconsejarle a los que están en el gobierno abandonar sus cargos.
No es una ni dos las veces que el Partido Reformista ha anunciado que no será bisagra de nadie.
Esta vez lo hizo el presidente de esa organización Federico Antun Batlle, quien es el actual administrador del Banco Nacional de la Vivienda, decisión que los peledeístas respetan.
Sin embargo, la discusión se centra en que si verdaderamente se querría una ruptura, todos los reformistas que ocupan cargos en el gobierno deberían renunciar.
En las últimas elecciones el partido rojo obtuvo un 5 por ciento de los votos. Ahora también se discute si solo bajaría o subiría ese porcentaje.