El arzobispo de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria, ofició una misa de desagravio por la profanación a la parroquia de la Epifanía en Villa Carmen de Santo Domingo Este.
Los ladrones cargaron con el Sagrario, los Copones, el Cuerpo de Cristo, además de la música.
El rito consistió en penitencia y santificación de las piezas y dones repuestos, además de la unción del agua bendita.
En sus palabras Benito Ángeles, dijo que cada vez que se da una profanación es una prueba de la persecución de la iglesia.
Mientras que Francisco Ozoria dijo que los mueve la fé y la esperanza.
Una feligresía entusiasta acompañó a todos los sacerdotes desde el patio de la iglesia hasta el templo.