No sólo los arquitectos y los ingenieros incurren en endeudamientos productos de los retrasos en el pago de cubicaciones en las obras del Gobierno, sino además los maestros constructores y los albañiles.
Se trata de una situación preocupante a juicio de miembros de la Unión Nacional de Maestros Constructores, quienes afirman que casos como el suicidio del arquitecto David Rodríguez podrían repetirse en cualquier momento.
Dicen que es tal la problemática que además de afectar su condición económica, también es motivo de muchos divorcios.
El tema fue tratado en la décima asamblea nacional de la institución donde exigieron que se les incluya en los sorteos de obras y ser regulados por el Ministerio de Obras Públicas y no por el CODIA.