La naturaleza es caprichosa y en ocasiones sorprende.
Es el caso de este mango, calificado como siamés, porque aparentemente tiene dos semillas.
Cayó de una mata ubicada en residencial Don Gregorio, en Pantoja, en una vivienda ubicada en la Manzana Q número uno.
El propietario es Alis Rafael Paulino, quien no sale del asombro y ha reservado el fruto para que lo deguste su madre.