A pesar del Plan de Seguridad implementado en algunos barrios de San Cristóbal, la gente no se siente tranquila porque se mantienen los robos y atracos a plena luz del día.
Desde la Comandancia de la zona salen todos los días cientos de agentes a patrullar en horas del día y la noche.
Son mas de trescientos los destinados a esta tarea, y solo para Jeringa y Las Flores hay destinados 105 policías.
Para el comandante Juan Francisco Solano han logrado aplacar el problema de inseguridad en esos dos barrios, considerados entre los más calientes de la comarca.
San Cristóbal tiene una densidad poblacional de 459 habitantes por kilómetros cuadrado, y solo once patrullas salen a enfrentar la inseguridad en las noches.
Es de ahí que la gente no siente que este funcionando el plan de seguridad.
Durante un recorrido por el corazón de Madre Vieja Norte pudimos contactar el nivel de incredulidad que tiene la gente cuando se les habla de seguridad ciudadana.
Y no son solo los colmaderos. Los motoconchistas se sienten inseguros, pero también le temen a los agentes que se dedican a quitarle los pesitos que se ganan.
La delincuencia se ha mudado de un barrio a otro en la provincia de San Cristóbal, lo que evidencia que hace implementar una nueva logística para frenar un problema que se multiplica como la verdolaga.