La empresa Dream Casinos Corporation, de capital canadiense, demandaron este jueves civil y penalmente al Banco Popular Dominicano en la persona de su presidente Manuel Alejando Grullón.
En la demanda por 425 millones de dólares, los ejecutivos de la entidad acusan al banco de cerrar abruptamente las cuentas del negocio sin ofrecer ninguna explicación y de haber enviado correos a las demás instituciones bancarias insinuando que esa empresa es producto del lavado de activos.
La información la ofreció Pedro Duarte Canaán, abogado de los demandantes, quien aseguró que el Popular ha causado cuantiosos daños a institución que asegura genera más de cinco mil empleos directos.