El embajador de Gran Bretaña, Steven Fisher, reiteró que dos importantes empresas británicas se marcharon del país, víctimas de sobornos de funcionarios.
Reveló que recibió una carta del Procurador General de la República la cual responderá en el momento oportuno.
Dijo que hizo el señalamiento porque su participación se trataba sobre corrupción, pero reconoció que no debió decirlo públicamente.
