La Casa Blanca dijo que Estados Unidos sigue abierto a negociaciones "auténticas y creíbles" con Corea del Norte, pero que Pyongyang tiene que demostrar primero que habla en serio acerca de abandonar su ambición de ser una potencia nuclear.
En declaraciones a bordo del avión presidencial, un portavoz de la Casa Blanca dijo que hasta ahora estaba haciendo todo lo contrario, a juzgar por lo que él llamó las acciones bélicas y las palabras que emanan de Corea del Norte.
Anteriormente, Pyongyang emitió precondiciones para futuras conversaciones con Estados Unidos y Corea del Sur, incluyendo el levantamiento de las sanciones de la ONU y el fin de los ejercicios militares estadounidense en Corea del Sur.
Un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Sur desestimó las demandas al considerarlas "ilógicas".