Dos jóvenes murieron mientras limpiaban un pozo séptico en una finca de Moca, provincia Espaillat.
Dentro de la excavación se generaron gases que le provocaron la asfixia a los jóvenes originarios de La Vega.
Un bombero también resultó con problemas respiratorios, pese a que tenía un tanque de oxigeno y una máscara al momento de introducirse en el pozo.
Los cadáveres de los dos hombres se encuentran en el Instituto de Ciencias Forenses de Santiago de los Caballeros.