Cientos de motoristas continuaron acudiendo al depósito de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre, en el antiguo Canódromo, a retirar sus motocicletas.
Los motores fueron retenidos supuestamente en una actitud abusiva por agentes pese a tener sus papeles en orden y el casco protector, según dijeron los motoconchistas.
Explicaron que una vez pagan la multa y van a retirar sus motocicletas son múltiples las trabas con las que se encuentran, puesto que les solicitan una serie de documentos y procesos.
Dijeron que sus motocicletas son su medio de sustento y el de sus familias por lo que catalogaron de injusta la acción.