Decenas de viviendas resultaron inundadas por la crecida del Río Haina en Manoguayabo, donde además quedó incomunicado el paso hacia la Pared de Haina.
A las dos de la madrugada se despertó Priscila Corporán, sobresaltada por el fuerte ruido que hacía el río Haina, que ya empezaba a penetrar a algunas casas cercanas.
El nivel del agua llegó rápidamente casi a la mitad de su residencia dejando las huellas en sus paredes. Fue necesario llevar casi todos sus ajuares, aunque ya empapados, a la casa de su madre, ubicada en un lugar más seguro.
Esta misma situación viven decenas de familia en el sector conocido como El Control, muchas de las cuales no saben cómo pasarán la noche luego de que sus colchones resultaron empapados.
Pese a que las lluvias no han cedido, muchos se resisten a abandonar sus hogares.
El desbordamiento del afluente también afectó por el puente que comunica a sector Bienvenido con la Pared de Haina.
Dos agentes de la policía y una cuerda impiden a conductores pasar por el lugar para evitar hechos lamentables.
A los daños se suma la perdida de animales.