Está vivo, milagrosamente, un miembro del cuerpo de bomberos del municipio Tamboril en Santiago que sufrió una descarga eléctrica durante una operación a la que su brigada fue llamada, mientras que los organismos de socorro en las provincias Santiago y Puerto Plata están en sesión permanente y vigilantes ante el paso de la Tormenta Érica por el territorio nacional.
Según informaciones suministradas por la Defensa Civil, Keny Santana de 17 años, estaba sobre una casa techada de zinc removiendo unas ramas de un árbol cuando un cable de alta tensión cayó, provocándole quemaduras de tercer grado. El adolecente está ingresado en el Hospital Arturo Grullón de esta ciudad, en condiciones estables.
Por otro lado, los vientos de acentuada intensidad derribaron un árbol sobre la pared del Colegio Santo Niño de Atocha en el Ensanche Libertad, oeste de Santiago, bajo el árbol, un banco que sirve para el esparcimiento de los residentes estaba vacío, milagrosamente nadie resultó herido.
Otro árbol en condiciones similares en la calle nueve, esquina dos, necesita ser cortado para evitar una tragedia, hacen el llamado a los organismos competentes.
El comité de prevención, mitigación y respuesta está activado en Santiago y la exhortación la hace la Defensa Civil a quienes residen en las 54 zonas vulnerables que ha identificado.
Santiago cuenta con 61 albergues con capacidad para más de 40 mil personas. El comercio ha cerrado sus puertas, al menos en el centro de la ciudad.
En Puerto Plata, a partir de las siete de la noche de este viernes aumentó de forma considerable el oleaje, mientras en zonas vulnerables como el barrio Nuevo Renacer, hay alerta por las crecidas del río San Marcos.