Los que dejaron vencer el plazo para renovar sus marbetes la están pasando difícil.
Los agentes de la Amet continúan incautando vehículos y ya los centros de depósitos que operan en el Canódromo y la avenida Independencia están prácticamente llenos.
Las personas afectadas por la retención de sus vehículos se mostraban irritadas pero rehusaban expresar sus quejas frente a la cámara.