Un grupo de sospechosos militantes yihadistas, que fue desarticulado en un operativo antiterrorista en Bélgica planeaba, planeaba matar policías en la calle y en estaciones policiales, según la fiscalía de ese país.
Los ataques planeados eran inminentes, aseguraron las autoridades, añadiendo que los dos sospechosos muertos en la ciudad de Vervier durante redadas todavía no habían sido identificados.
La búsqueda de más sospechosos se extendió durante la madrugada de viernes en la zona de Bruselas.
13 sospechosos fueron arrestados en Bélgica y dos en Francia.
También se incautaron armas, municiones y explosivos así como uniformes de policía y cuantiosas sumas de dinero, según un portavoz de la fiscalía.
BBC Mundo