El desvío de esos fondos se hizo mediante doce contratos públicos entregados a través del Fondo de Programas Especiales para la Paz de los que se benefició una empresa cuyo dueño es el mediador de las Farc en aquel momento, Henry Acosta Patiño y su esposa.
Así lo revela el periodista Daniel Coronell, vicepresidente de noticias de la cadena estadounidense Univisión y columnista de Semana, en un artículo publicado en esa revista.
Las conversaciones para llegar a ese acuerdo las mantuvieron el entonces alto comisionado para la paz, Luis Carlos Restrepo y el propio Acuña y fueron interceptadas por orden de una fiscal que investigaba una red de apoyo a las Farc
Durante esas charlas, Restrepo dijo a Acuña que quería «ganarse el crédito» para «que se sepa que hay tanta voluntad de este lado, que de una vez el comisionado en persona se puso al frente».
Dos días después de que se concedieran los últimos contratos el xpresidente Uribe mantuvo una reunión con el mediador Acosta su esposa y Restrepo, según desvela la información de Semana.
Una semana después de ese encuentro Acosta llevó a uno de los líderes de las Farc Jorge Torres Victoria, alias «Pablo Catatumbo», una carta-borrador en la que ofreció al líder guerrillero condiciones para iniciar las conversaciones de paz.
Hace siete días, Coronell también desveló que Uribe intentó iniciar un proceso de paz con las FARC en 2006 para lo cual ofreció a la guerrilla la posibilidad de desmilitarizar una zona del país e incluso llegó a plantear la opción de realizar las conversaciones en Brasil.
El artículo desencadenó muchas críticas puesto que Uribe viene calificando de inadmisibles las negociaciones de paz en Cuba entreel Gobierno de su sucesor, el actual presidente Juan Manuel Santos, y esa guerrilla.
Las Farc también confirmaron a través de un comunicado que dicho acercamiento se había producido y confirmaron que la zona en la que debían desarrollarse las negociaciones fue desmilitarizada en las fechas acordadas.