EFE:- Un hombre de 44 años, con doble nacionalidad española y mexicana, ha sido detenido este jueves en Bulgaria después de haber confesado que asesinó y descuartizó a su esposa, de nacionalidad búlgara, y que enterró los restos en una carretera.

Fuentes de la investigación han desvelado a los medios locales que el asesinato se produjo el pasado sábado en la localidad de Razgrad, a unos 270 kilómetros de Sofía, donde el detenido, identificado como Pablo Sánchez, vivía con su mujer y sus tres hijos en un departamento de sus suegros.

El padre de Silvia Yordanova Petrova informó el domingo sobre su desaparición, y en los primeros interrogatorios el esposo afirmó desconocer el paradero de su mujer.

“Voluntarios de Razgrad se sumaron a la búsqueda y se analizó una enorme cantidad de información para saber qué sucedió realmente. En el transcurso de los trabajos se obtuvo información sobre el asesinato y se notificó al fiscal del distrito Tihomir Todorov”, explicó el director de la Dirección Regional del Ministerio del Interior, Diyan Minkov.

De acuerdo con su declaración, aproximadamente a la una de la madrugada de este jueves, en el área de la zona industrial occidental de la ciudad, se encontraron partes del cuerpo de Sylvia, enterradas en 4 lugares diferentes.

El comisionado Minkov detalló que la ubicación de los restos fue indicada por el esposo de Sylvia, Pablo Sánchez, nacido en México y con ciudadanía española. Inicialmente estuvo detenido varias horas, pero tras mostrarle varias grabaciones terminaría confesando el crimen.

Según la información de la prensa local, Sánchez fue descrito como un hombre “sumamente erudito”, políglota, vegetariano y partidario del movimiento antivacunas. Presuntamente se recibió como economista en la Ciudad de México, y actualmente trabajaba en el aeropuerto de Tenerife, España, al parecer en un puesto importante.

Las autoridades indicaron que había construido una “buena coartada”, pues los sitios donde ocultó los restos se encontraban “lejos de la casa donde mató a Sylvia”, precisó el fiscal del distrito de Razgrad, Tikhomir Todorov, durante una rueda de prensa.

Sin embargo, al parecer las imágenes de las cámaras de la ciudad habrían terminado por confirmar el crimen.

Presuntamente, con baste en esta evidencia, Sánchez terminaría confesando que degolló a su esposa en el cuarto de baño de su casa. Posteriormente habría desmembrado el cuerpo y realizado varios viajes en bicicleta para llevar los restos del cadáver a diferentes puntos de la localidad.

 

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