La Asamblea Nacional de Venezuela, de mayoría opositora, rechazó este viernes un decreto de emergencia económica que presentó el presidente de la nación, Nicolás Maduro, hace una semana.
«Alguien con el mínimo nivel de alfabetización en economía no habría escrito un decreto tan peligroso para el país», dijo el diputado y economista José Guerra al presentar el informe parlamentario en el que se basó la votación.
La oposición dijo que el decreto no ofrecía soluciones para los problemas económicos, sino profundizaba el modelo que impuso el gobierno socialista en los últimos 17 años.
Voceros opositores calificaron el decreto como una «trampa» del oficialismo para restarle competencias a la Asamblea Nacional, pues dicen que las medidas para resolver los problemas económicos no necesitan de poderes especiales.
Maduro argumentó que el decreto, con el que habría podido gobernar sin la mediación del legislativo, era una forma de enfrentar la supuesta «guerra económica» que considera la fuente de los problemas del país.
El oficialismo calificó el rechazo como una forma de «darle la espalda al pueblo».
«La oposición admite que hay una crisis, pero niega un decreto para sacarnos de la crisis», se quejó el diputado Diosdado Cabello.
- Qué significa el decreto de emergencia económica en Venezuela
Medidas urgentes
«El decreto de emergencia estaba basado en la teoría del oficialismo de la guerra económica y fue escrito de manera unilateral, por lo que era muy poco probable que fuera aprobado por la mayoría opositora», explica el corresponsal de BBC Mundo en Venezuela, Daniel Pardo.
«Muchos creen que la única forma de que se produzcan las medidas urgentes que esperan los venezolanos es con un diálogo fructífero y honesto entre las partes, algo que en las últimas semanas ha sido imposible y en este momento no se ve probable», explica Pardo.
El viernes, el Fondo Monetario Internacional (FMI) proyectó una recesión en Venezuela del 8% y una inflación del 720% para 2016, tendencia que, de darse, aumentaría la ya tensa situación socioeconómica.
Además de una crisis interna de carácter monetario y fiscal, Venezuela se ha visto fuertemente golpeada por la caída del 80% del precio del petróleo, que es la fuente del 95% de sus ingresos.
La crisis económica, marcada por la escasez de productos básicos y la inflación más alta del mundo, es considerada la causa de la derrota electoral del gobierno del pasado diciembre, que le dio a la oposición la mayoría en el Parlamento por primera vez en 17 años y cambió el escenario político en el país.